El libro fundacional de la ermita de Sant Vicent

 

Escrito en 1813 por Mossen Joan Ivorra, fue custodiado por la familia Soler Ivorra "El Moreno" hasta el año 2003. Restaurado por la Consellería de Cultura fue donado por José Soler Pérez al Ayuntamiento de La Nucia, donde se conserva en el archivo municipal. Según consta en este libro, en 1802 se consiguió licencia para la construcción de la ermita del Excmo. y Rdo. Sr. Arzobispo de Valencia D. Joaquín Company. Al año siguiente, en 1803 bendijo la ermita D. Miguel Femenía, vicario de la parroquia de La Nucia y cantó la primera misa D. Jerónimo Llorca, el día de San Vicente Ferrer.

Desde 1803 a 1812 el culto de esta ermita estuvo a cargo de la Comunidad Franciscana de Altea. En este último año, por miedo a la entrada de las tropas francesas en Altea, se disolvió la comunidad franciscana, y los vecinos del Captivador encargaron la celebración del culto religioso al párroco de La Nucia.

El 10 de mayo de 1817 se colocó la campana en la espadaña de la ermita. En 1865 los vecinos del Captivador hicieron una restauración general de la ermita.

Durante la Guerra Civil (1936-1939), la ermita fue saqueada y las imágenes destruidas, siendo restaurada al finalizar la contienda. En 1999 fue entronizada una nueva imagen de San Vicente Ferrer, obra del escultor D. José Esteve Edo y restaurado con pulcritud el altar mayor por la Consellería de Cultura.

En el año 2006 fue bendecida y entronizada una nueva imagen de la Virgen de los Desamparados, obra del escultor D. Miguel Angel Casañ y restaurado su altar. En el 2010, VI Centenario del viaje de San Vicente Ferrer, se ha restaurado totalmente la ermita, quedando como estaba en su origen, y ello ha sido posible gracias a los datos que constan en su libro fundacional.